Un puerta a puerta realizaron carabineros de la Subcomisaría Norte de Antofagasta, en vista del importante incremento experimentado la semana pasada por los delitos contra el parque vehicular.

El jefe de dicho destacamento, capitán Juan Andrade Carvajal, explicó que fueron cerca de 40 las casas visitadas, cuyos dueños recibieron recomendaciones para evitar que sean las próximas víctimas de delitos.

La iniciativa se concentró en la villa Altos Club Hípico, ya que allí es precisamente donde la semana pasada se concentraron los robos de vehículos y de accesorios de éstos.

En ello las cifras son claras. De las 14 máquinas robadas, nueve correspondieron al cuadrante 13 y la mayoría a esa población.

De ahí la importancia de conocer las inquietudes de sus vecinos y entregarles a éstos consejos para evitar que sus descuidos- la principal causa de los delitos - terminen en la sustracción de sus móviles o especies de éstos. J

Con tres detenidos, uno de ellos menor de edad, terminaron los desórdenes protagonizados por un grupo de jóvenes en el sector norte alto de Antofagasta.

Los hechos tuvieron su origen en incidentes que tenían lugar pasadas las 19 horas en calle Santa Marta esquina Huamachuco, los que obligaron que funcionarios del cuadrante 12 la Subcomisaría Norte se desplazaran hasta el lugar. Allí los uniformados encontraron un hostil recibimiento, viéndose en la obligación de solicitar refuerzos para el control de la situación. Fue así como acudieron rápidamente dispositivos los cuadrantes 11, 12 y 13, evitando con ello que continuaran los ataques a pedradas que recibieron los primeros efectivos en constituirse.

Al iniciar controles de identidad, uno de ellos se dio a la fuga e ingresó a una vivienda de calle Santa Marta, siendo nuevamente los carabineros agredidos por vecinos del sector. Pese a ello, consiguieron la detención de C.N.O.M., mujer de 29 años que registraba una orden de aprehensión por hurto, C.A.H.R. (20) y J.A E.R (15).

Un carabinero resultó con lesionado leve. J

Quince años de cárcel suman las penas impuestas a una pareja, que hace seis meses asaltó a tres menores de edad en un parque del sector norte de Antofagasta.

Los sentenciados son Yessenia Toro Marambio, comerciante de 23 años, y Manuel Alejandro Carvajal Barriga (28), enfierrador. La primera fue condenada a 5 años y un día de presidio mayor en su grado mínimo, accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos e inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure de la condena, más el pago de las costas de la causa.

Carvajal Barriga, en tanto, recibió una pena de 10 años y un día de presidio mayor en su grado medio, accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos e inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras dure de la condena, más el pago de las costas de la causa.

ASALTO

Ambos fueron hallados culpables en calidad de autores del delito de robo con intimidación cometido el 26 de febrero pasado y, al no reunir los sentenciados los requisitos de la Ley 18.216, deberán cumplir sus condenas en forma efectiva.

La acusación la sostuvo el fiscal adjunto Patricio Martínez Felip, quien indicó que aproximadamente a las 17.50 horas "las víctimas de iniciales A.I.H.P., B.A.H.P. y S.F.R.S., todos menores de edad, se encontraban en el sector de la Plaza de la Avenida Las Palmeras, en Antofagasta, lugar en el que los acusados se les acercaron en forma violenta e intimidatoria".

La mujer les indicó que tenía un cuchillo, simulando llevar su mano a un banano que portaba para sacar algo. Acto seguido se acercó a S.F.R.S., a quien le dijo que lo apuñalaría si no le entrega el celular que portaba. El menor le entregó entonces su teléfono marca Motorola G.

En esos momentos- agrega la acusación fiscal - "Manuel Carvajal se acercó a A.I.H.P., a quien de un tirón le quitó un jockey de color negro que traía puesto, y a B.A.H.P. le quitó los audífonos y su teléfono celular Samsung Galaxy S4, que portaba en su bolsillo. Luego de lo descrito, ambos acusados se dan a la fuga en forma conjunta".

Sin embargo, los condenados fueron seguidos por un tercero, que logró detenerlos y recuperar las especies robadas que aún mantenían en su poder. J