Mujeres I
Señor director:
La coordinación del 8M ha sido enfática en señalar que todas las mujeres no deben cocinar, trabajar o hacer labores de la casa en el día de la mujer, siendo una condición para participar del activismo que implica ser parte del feminismo en Chile. No obstante, creo que comenten un gran error al juzgar el apoyo del género en base a estos cánones. Históricamente, las mujeres hemos luchado por tener nuestra propia voluntad, no depender de estigmas sociales y sobre todo tener libertad de elección frente a las decisiones que tomamos a diario. Cabe recordar que los grandes alegatos se han gestado debido a que "otros" nos han impuesto lo que debemos pensar y hacer, aunque no nos guste.
Si hoy vemos grandes avances en la materia, no es porque nos han pauteado nuestro proceder sino porque hemos actuado todas juntas en beneficio de una causa mayor, ya sea manifestándonos en las calles o instalando un modo diferente de ver la vida. No metamos temas ajenos a la unidad, no nos separemos y mantengamos vivo un movimiento con la fuerza y la libertad que siempre ha caracterizado para lograr grandes cosas.
Tamara Hube
Mujeres II
Señor director:
Debido a las marchas fijadas para el 8M quiero decirles que para mí la mayor muestra de feminismo es mi madre, quien debió dejar sus estudios medios para ayudar a criar a sus hermanos por ser la mayor. A los 21 se casó y vivió bajo las costumbres machistas, las cuales a diario se hicieron parte de su vida a tal punto de -a veces- justificarlas. Luego de terminar con aquella relación y habiendo criado 3 hijos, decidió seguir sus estudios medios en secretariado y dio un gran salto a la universidad, terminando el lunes pasado con su carrera de Técnico Nivel Superior en Recursos Humanos con nota 7.0.
Por eso al ver el llamado a las marchas para hacer destrozos, a tomarse los colegios y universidades, no me queda más que decir, ¿qué clase de enseñanza queremos transmitir? ¿Tan mal enfocada esta la "lucha" feminista?
Mi madre vivió el machismo "puro", la criaron con ese pensamiento y logró cambiar su historia con esfuerzo y dedicación, demostrando que sí se puede luchar pacíficamente y no con este seudo feminismo y "reivindicación social". Eres mi ejemplo, Alicia Magdalena Soto Sánchez.
Rodrigo Riveros Soto