Cartas
Atención en Hospital Regional
Señor director:
Al iniciarse el nuevo Hospital Regional de Antofagasta, hubo descoordinaciones administrativas muy notorias que provocaron el malestar en la mayoría de los pacientes. Un solo ejemplo: al tener una citación al médico a las 9 horas, fui atendido cerca de las 16 horas.
Al pedirle explicaciones al profesional, argumentó que este absurdo era netamente problema administrativo, debido que él iniciaba su turno recién a las 15:00.
Feliz y gradualmente se han ido superando algunos problemas que afectan a personas de la tercera edad.
Al respecto, aún quedan detalles que mejorar y me permito presentar el siguiente escenario. En el primer piso, en "Atención adulto mayor", donde al llegar al lugar hay que sacar número de atención para las ventanillas, se produce la siguiente situación: estando en ventanilla, y si existiera algún detalle en los documentos, las funcionarias de las ventanillas 1 y 2 se lo dirán por parlantes. Mientras esto sucede, en la pantalla del monitor aparece el número y la voz grabada indicando también el número y la respectiva ventanilla que corresponde en forma constante y sostenida para seguir el orden.
Hasta aquí ya podríamos escuchar tres voces, pero a esto se agrega que una vez estando las fichas en el interior proceden a llamar al paciente mediante potentes parlantes para indicar el número de box.
Ya podríamos tener 4 voces al mismo tiempo, pero hay más, ya que por la puerta 1 o puerta 2 aparecen funcionarias y con voz en cuello llaman a personas o bien indican que tal médico no asistirá, por lo tanto ya tenemos una mezcla de 5 voces a la vez.
Si a lo anterior le sumamos las conversaciones y hasta las risas de los numerosos pacientes que estimo podrían llegar fácilmente a 150 personas, nos vemos enfrentados a una eventual torre de Babel.
El problema es para aquellos adultos mayores que sufren algún trastorno auditivo, que de no responder, sencillamente pierde su hora de citación.
Esperamos que esta situación mejore, diseñando ventanillas donde se pueda dialogar con funcionarias y evitar parlantes. También que las funcionarias que llaman en vivo tengan prudencia y esperen que se acallen los parlantes para hacer su llamado.
Pequeños detalles pueden hacer más grata la asistencia al hospital en lo cual todos debemos aportar y que no se convierta en situación estresante para pacientes y funcionarias.
Gracias señor director.
Raúl Galleguillos Carrizo