Foto denuncia: Fuga de agua
"@Aguas_Antof, fuga de agua bajo la carpeta asfáltica, en #Huasco a la altura del 1200, #Antofagasta", escribió @AlexisBolbaran junto a esta imagen.
"@Aguas_Antof, fuga de agua bajo la carpeta asfáltica, en #Huasco a la altura del 1200, #Antofagasta", escribió @AlexisBolbaran junto a esta imagen.
Señor director:
"Este tranquilo pedacito del Océano Pacifico. Este trocito casi rectangular de agua salada a disposición de las niñas y niños pequeños del norte, siempre fueron aguas mansas y calmas donde comenzamos nuestro amor y respeto por el mar azul de Antofagasta".
Te acuerdas del tiempo en que los niños debían obligatoriamente bañarse en la poza chica, aunque estuviera la marea baja y el agua les llegara a los tobillos, comentábamos con algunos colegas profesores una tarde de calurosos minutos de recreo en que el verano se acercaba sin contratiempos... Sí, afirmaron casi al unísono los y las colegas con un dejo de nostalgia, eran los años en que el tiempo transcurría más lento, las horas daban abasto para todas nuestras actividades, existía más quietud y amor por Antofagasta, había espacio para todo lo correcto. Podíamos ser exploradores de un mundo conocido, inocente y tangible de sol, playa, viento, agua, cerro y calle tranquila, jamás virtual o electrónico. Un mundo que siempre nos deparaba una sorpresa de la cual aprendíamos las realidades humanas de la vida familiar y social en compañía de nuestros amigos y amigas de la infancia que en una ciudad pequeña como Antofagasta dura toda la vida y te los encuentras en cada esquina céntrica de la ciudad.
Habrá e existido un lugar más democrático y concurrido en la Antofagasta de nuestros recuerdos que los "Baños Municipales" como lo llamaban nuestros abuelos y padres y lo que para nuestros tiempos de niñez y juventud ya lo comenzábamos a denominar "El Balneario Municipal y la poza chica".
Contará la historia que nuestro Balneario Municipal, incluida su poza chica , fue inaugurado en un caluroso mes de diciembre de 1921, hace ya casi 100 años, bajo la administración del alcalde modelo de la ciudad, Maximiliano Poblete Cortés después de grandes esfuerzos económicos, con los importantes aportes en material e ingeniería de las obras de la construcción del nuevo puerto y una férrea voluntad de progreso, no tan solo del destacado alcalde, sino que de todo su concejo de regidores que entendían que Antofagasta necesitaba un lugar de "Baños de Mar" seguro y resguardado de los oleajes y de aguas más limpias.
En verano todos los buses, todas góndolas, micros liebres, colectivos y taxis conducían a los "baños" casi sin excepción. En ese espacio diminuto de arena húmeda y mar cabía Antofagasta entera, del más adinerado ciudadano hasta el más humilde vecino de la Perla, con la única condición de querer gozar del mar sanamente.
Ricardo Rabanal Bustos
magíster en Educación
profesor, historiador y cronista
@denisse_soledad señala que: "Todas las semanas hay por lo menos un choque así en la misma esquina, El Yodo con El Azufre. Camión o bus con giro amplio que se lleva a un vehículo menor".