Keanu Reeves donó el 70% de su pago por "Matrix" a la ciencia
El actor entregó más de US$30 millones para contribuir a la investigación contra la leucemia, enfermedad que afectó a su hermana por 10 años.
C.C.
Pese a ser uno de los actores más famosos de Hollywood, Keanu Reeves tiene fama de sencillo. Y también de ser una buena persona. Una imagen que sólo se ha visto alimentada por los últimos reportes de prensa internacional que aseguran que el estadounidense donó la mayor parte de su pago por la primera entrega de la saga "Matrix" a la ciencia.
Según publicó el diario estadounidense The New York Post, Reeves entregó el 70% de lo que le pagaron por filmar la taquillera película de 1999, que acaba de estrenar su cuarta entrega, titulada "Matrix Resurrecciones".
Ese medio informó que el actor de 57 años recibió un primer pago de US$10 millones por la película de ciencia ficción y luego otro por US$35 millones, cuando el estreno se convirtió en un éxito. De ese total, Reeves donó US$31,5 millones para la investigación científica para dar con una cura contra la leucemia.
Se trata de una enfermedad que el actor conoce de cerca, pues le fue diagnosticada a su hermana, Kim, en 1991, quien la padeció por una década hasta que remitió recién en 2001, por lo que aún estaba en tratamiento cuando "Matrix" se estrenó.
Según el diario Los Angeles Times, Keanu Reeves ha hecho donaciones posteriores a la investigación científica contra el cáncer, e incluso creó su propio fondo con ese mismo fin, aunque lo ha hecho anónimamente.
El bueno de reeves
Esta no es la única acción generosa que se ha sabido del actor que se hizo famoso en los 80 con cintas como "Relaciones peligrosas" y la comedia "Bill & Ted". En 2015 se viralizó un video que mostraba a la estrella de la saga "John Wick" cediéndole su asiento en el metro de Nueva York a una mujer que cargaba un bolso grande. Reeves ha sido fotografiado varias veces usando ese medio de transporte, pese a su fama.
Otro momento bondadoso que agarró vuelo en internet, fue cuando en 2019 un fan contó que el actor compró un helado solamente para usar la boleta y darle un autógrafo.
El mismo año un vuelo en el que viajaba tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia, lo que no impidió que Reeves se tomara fotos con los pasajeros, e incluso gestionara el viaje a San Francisco, que era el destino final.